Más alla del principio de placer

MÁS ALLÁ DEL PRINCIPIO DEL PLACER CAP. IV

La especulación psicoanalítica arranca de la impresión recibida a raíz de la indagación de procesos inconcientes, de que la conciencia no puede ser el carácter más universal de los procesos anímicos, sino sólo una función particular de ellos.

En terminología metapsicológica sostiene que la conciencia es la operación de un sistema particular, al quellama Cc.

Puesto que la conciencia brinda en lo esencial percepciones de excitaciones que vienen del mundo exterior, y sensaciones de placer y displacer que sólo pueden originarse en el interior del aparato anímico, es posible atribuir al sistema P-Cc una posición espacial. Tiene que encontrarse en la frontera entre lo exterior y lo interior, estar vuelto hacia el mundo exterior y envolver alos otros sistemas psíquicos.

La anatomía cerebral no necesita ocuparse de la razón por la cual la conciencia está colocada justamente en la superficie de encéfalo, en vez de estar alojada en alguna otra parte, en lo más recóndito de él.

No hacemos sino apoyarnos en las impresiones que nos brinda nuestra experiencia psicoanalítica si adoptamos la hipótesis de que todos los procesosexcitatorios de los otros sistemas les dejan como secuela huellas permanentes que son la base de la memoria, vale decir, restos mnémicos que nada tienen que ver con el devenir-conciente.

Si permanecieran siempre concientes, muy pronto reducirían la aptitud de este sistema para la recepción de nuevas excitaciones; y si por el contrario devinieran inconcientes, nos enfrentarían con la tarea de explicar laexistencia de procesos inconcientes en un sistema cuyo funcionamiento va acompañado en general por el fenómeno de la conciencia.

Aunque esta consideración carezca de fuerza lógica concluyente, puede movernos a conjeturar que para un mismo sistema son inconciliables el devenir-conciente y el dejar como secuela una huella mnémica. Así, podríamos decir que en el sistema Cc el proceso excitatoriodeviene conciente, pero no le deja como secuela ninguna huella duradera; todas las huellas de ese proceso, huellas en que se apoya el recuerdo, se producirían a raíz de la propagación de la excitación a los sistemas internos contiguos, y en estos.

“La conciencia surge en remplazo de la huella mnémica.”

El sistema Cc se singularizaría entonces por la particularidad de que en él, el proceso deexcitación no deja tras sí una alteración permanente de sus elementos, sino que se agota, en el fenómeno de devenir-conciente.

Una supuesta explicación a esto sería que en su avance de un elemento al otro la excitación tiene que vencer una resistencia, y justamente la reducción de esta crea la huella permanente de la excitación (facilitación).

Podríamos conjugar esta imagen con el distingode Breuer entre energía de investidura ligada y libremente móvil en los elementos de los sistemas psíquicos; los elementos del sistema Cc no conducirían entonces a ninguna energía ligada, sino sólo una energía susceptible de libre descarga.

Protección antiestímulo, para el organismo vivo, la tarea de protegerse contra los estímulos es casi más importante que la de recibirlos; está dotado de unareserva energética propia, y en su interior se despliegan formas particulares de transformación de la energía: su principal afán tiene que ser preservarlas del influjo nivelador, y por tanto destructivo, de las energías hipergrandes que laboran fuera.

La recepción de estímulos que sirve al propósito de averiguar la orientación y la índole de los estímulos exteriores, y para ello debe bastar contomar pequeñas muestras del mundo externo, probarlo en cantidades pequeñas.

La tesis de Kant según la cual tiempo y espacio son formas necesarias de nuestro pensar puede hoy someterse a revisión a la luz de ciertos conocimientos psicoanalíticos. Tenemos averiguado que los procesos anímicos inconcientes son en sí . Esto significa que no se ordenaron temporalmente, que el tiempo no altera nada…