El principio supremo de la moralidad

El Principio Supremo de la Moralidad

Por Ismael Martínez Liébana

Los problemas que hasta aquí hemos investigado son de índole eminentemente teórica. En todos ellos, en efecto, subyace la pretensión última de saber, de averiguar qué es el ser, cuál es su naturaleza, cuáles son sus propiedades y relaciones esenciales, en algunas de sus manifestaciones más relevantes y significativas desde elpunto de vista filosófico. Hemos practicado, pues con las investigaciones que hasta ahora hemos hecho, una filosofía teórica o del ser, en la que el hombre se nos ha revelado ante todo en su dimensión estática y pasiva, como ser conocedor y contemplador, como mero espectador de lo que hay (del universo y de si mismo). Ahora bien, el hombre no es sólo un ente pasivo y estático, un ente que se limitea “ver y contemplar el ser en sus diversas manifestaciones; es también un ente activo y dinámico, un ente que actúa, que interviene en el ser hombre, así, es también y ante todo actor en el escenario del universo. A una filosofía teórica se superpone, pues, una filosofía práctica, una filosofía del hacer y del actuar.

El hombre, en efecto, aparte de conoces de contemplar, hace cosas: hacetécnica, hace historia, hace política y, sobretodo, hace el bien y hace el mal, hace cosas justas e injustas, hace cosas honrosas y hace cosas reprobables; en definitiva, el hombre, ante todo, hace ética o moral. Por ésta, el hombre es considerado una realidad puente entre lo que hay y lo que debería haber, entre el ser y el deber ser. En virtud de esta consideración, el hombre es sujeto depredicados morales; de él y de lo que hace podemos decir, en efecto, que es bueno o malo, justo o injusto, plausible o censurable. Cuando, por ejemplo, alguien presta ayuda a un amigo en apuros, de él decimos que es una buena persona; en cambio, cuando un superior, prevaliéndose de su posición, perjudica gravemente a un subordinado, su acción es considerada claramente como injusta. En este último capítulonos adentraremos en el terreno de la ética o filosofía moral Nos ocuparemos de esa dimensión práctica del hombre por la que éste es susceptible de bondad o maldad moral, por jaque sus actos en el mundo pueden ser calificados de justos o injustos, de honrosos o censurables. En concreto, nuestra investigación girará aquí en torno a un problema central, capital: el de determinar (si la hay) lanorma moral suprema por la que nuestros actos pueden ser calificados de buenos o malos moralmente; esto es (y tomando como base de la interrogación los ejemplos anteriores), nos preguntaremos: ¿qué norma ética fundamental hace buena moralmente la conducta del amigo que presta ayuda y mala la del superior que daña los intereses de su subordinado? En las páginas que siguen, examinaremos sucintamentelas respuestas más clásicas y significativas dadas a este problema, al hilo de cuya exposición nos haremos cargo igualmente de otros problemas éticos estrechamente relacionados con él.

1. El objeto de la ética
Ante todo, hemos de fijar y precisar el concepto de ética. Este término deriva del vocablo griego ethos, que significa carácter y costumbre (en latín: mos, moris). Por ello se hadefinido con frecuencia la ética como la doctrina de las costumbres, sobre todo en las direcciones empiristas. Según esto, el carácter a que apunta la significación etimológica de la ética no es el temperamento o constitución psicofísica innata del individuo, sino la forma o modo de ser peculiar que la persona va adquiriendo paulatinamente a lo largo de su vida. La índole práctica y no teórica de laética a que antes aludíamos se halla claramente subrayada por Aristóteles en los siguientes términos.

Así pues, puesto que el presente estudio no es teórico como los otros (pues investigamos no para saber qué es la virtud, sino para ser buenos, ya que de otro modo ningún beneficio sacaríamos de ella), debemos examinar lo relativo a las acciones, como hay que realizarlas, pues ellas son las…