David y el rufian

David y el Rufián

(Roberto está sentado a solas en una esquina del escenario. Juan está parado en la esquina opuesta mientras carga una caja pequeña. Leonardo el rufián camina hacia Roberto)

Leonardo: Oye Roberto, ¿lo trajiste? Y esta vez no quiero escuchar tus excusas tontas.

Roberto: Lo siento, pero hoy mi mama no me dio dinero y tu sabes que a mi no me gusta robar. Por favorno me pegues.

Leonardo: ¿Qué? ¡Has de estar bromeando! Yo te dije que tenías que pagar por tu propio bien. Ahora, oyeme bien Roberto. Si no traes el dinero mañana, te voy a lastimar tanto que no lo vas a poder olvidar. Deben venir con un mejor plan aun si tienes que robarle a tu mamita. ¿Me entiendes?

Roberto: Si claro… te traeré el dinero mañana.

(Leonardo el rufián camina haciaJuan y se para a su lado)

Leonardo: ¿Oye, por qué solo estás parado aquí? ¿Cuántos de esos paquetes has vendido hoy?

Juan: Hoy no he vendido ni uno. Alguien les está diciendo que no compren.

Leonardo: ¿Qué? ¡Como se atreve! ¿Quién es ese niño? ¡Dime ahorita!

Juan: Pues, oí que su nombre es David y que es nuevo aquí. Acaba de llegar hace unos días.

Leonardo: ¿Así queel piensa que el solo puede venir a MI escuela y hacer lo que quiere hacer? Pues voy a enseñarle una lección y voy a mostrarle quien es el jefe.

(Leonardo se va del escenario y Roberto camina hacia Juan y luego David camina hacia ellos.)

David: Hola, ¿cómo están?

Roberto: No tan bien. ¡Ese rufián me dijo que me iba a lastimar tanto que no lo iba a poder olvidar!

Juan: Si, elme hace vender estas drogas y solo puedo imaginar lo que va a pasar si no los vendo.

David: Pero eso no está bien. Tienen que decirle a tus padres o tus maestros.

Roberto: ¡Claro! Sería pero si hacemos eso.

David: Tiene que haber una solución. Yo voy a pensar en algo, pero en lo mientras, vamos a orar. Para que Dios los tome en Sus manos y que los ayude de verdad.

Juan:¿Orar? Nunca he orado en mi vida. Ni se como orar.

David: Pues es muy simple. Es como hablar con tu mejor amigo, pero estás hablando con Dios. Si quieren, podemos orar ahora.

Robert & Juan: Claro, vamos a hacerlo.

David: (Orando) Señor Jesús, gracias por tu amor y por tu protección. Por favor danos la fuerza para pelear contra el enemigo. Señor, esperamos y confiamos en que nosvas a ayudar a encontrar una solución para nuestros problemas. Te pedimos esto en tu nombre. Amen.

(Leonardo camina hacia los tres niños y señala un dedo a David y Roberto y Juan corren del escenario.)

Leonardo: ¿Así que tu has de ser el que está arruinando mi negocio?

David: ¿De qué estás hablando? Yo no he arruinado tu negocio, yo solo les estaba hablando acerca de Jesús.Leonardo: ¿Jesús? ¿Quién es el?

David: El es mi amigo que me ama y que me anima. Y me da regalos que ni siquiera tengo que pagar.

Leonardo: ¿De qué estás hablando? ¿A qué te refieres con regalos que no tienes que pagar? ¿Es caro o algo así? ¡Jajaja, creo que estás fumando algo!

David: No, yo no fumo, pero si le pago con mi obediencia y con mi amor.

Leonardo: ¿Quién es eseJesús? ¿Lo conozco yo? ¿Va a ésta escuela?

David: De hecho, El si viene a la Escuela. El quiere mucho a los niños que están aquí y a El no le gusta lo que les están diciendo lo que tienen que hacer. Además de eso, El te ama a ti también y sabe porque lo estás haciendo. El sabe que tienes muchos problemas y el sabe porque actúas de esa manera.

Leonardo: (Doblando sus brazos) ¿En serio?David: Si pero lo que tu no sabes es que no tienes que hacer cosas malas para ser popular. Para Jesús, tú ya eres popular. ¿Sabías que el también tiene muchos regalos para ti también y son gratuitos? Todo lo que tienes que hacer es recibir los regalos.

Leonardo: Yo no creo que hay alguien así. Todos los que yo conozco me cobrar o tengo que ganar lo que quiero recibir. Nadie me ama…